Bueno, vamos a ver si entre todos, aportamos nuestro granito de arena, para construír un futuro más esperanzador del que nos han estado imponiendo nuestros gobernantes y en primera instancia, el poder oculto que rige los destinos del mundo. Es importante que cambiemos el chip y nos pongamos en marcha.

Hace unos dias, tomé conciencia de el milagro que puede proporcionar la concesión de microcréditos a personas que tienen un proyecto empresarial o de subsistencia, pero que carecen de fondos económicos para llevarlos a cabo. Esos microcréditos, a muy bajo interés, están cambiando el mundo y nuestra mentalidad competitiva, por una forma de hacer negocios más humana y prestándo atención, no a la cuenta de resultados sino al bien que proporciona a la comunidad. Lo que ahora se llama, responsabilidad social corporativa, que en muchas empresas, deja mucho que desear. Hoy es perentorio, que esa RSC, se enfoque a la creación de riqueza para la sociedad y en este caso por las circunstancias que estamos viviéndo, a la creación de empleo, que es prioritario. Detrás de esas cifras desorbitantes de desempleados que se registra en España, hay seres humanos. Alguien preguntaba, (algún periodísta), que si llegaríamos a los séis millones de desempleados, como si ya con cinco, no fuera eso una tragedia.

Mi pequeño granito de arena es que, que nos pongamos en ACCIÓN.

Esa palabra maravillosa, destruye muros y miedos y pone en marcha el movimiento para llegar a todo lo que te propongas.

Si tienes un sueño en mente, toma todas tus energías y movilízalas para llevar a cabo ese sueño. Ya irán apareciendo posibilidades y puertas que se abran. Crée en tí y en que tus sueños, tengan argumentos sólidos de peso para que cristalicen y se hagan realidad. El proyecto de Bebury es un ejemplo en este sentido. Ocupate también de tu formación. Sin agobios, ocupándo tu propio espacio de inquietudes en la vida, desarrolla y aprende sobre temas que sean de tu interés. Nadie es más que nadie en este mundo, pese al lavado de cerebro que nos hacen desde la más tierna infancia, cuando nos educan. Todos podemos aportar mucho para transformar este mundo turbulento y lleno de violencia en otro de armonía y posibilidades. Crée en tí y en tus potencialidades.